sábado, 8 de marzo de 2008

"Invisible"

Caminando entre las gotas de lluvia y esquivando charcos de agua, me desvanecia, mi presencia se hacia nada y perdia la imagen de mi cuerpo... invisible a todos camine sin sentido, seguia pasos, seguia una voz, iba tras un aroma y perseguia una sombra.
Mis ojos perdian la noción y se nublaron con el andar cancino. Erguido con conviccion parecia un ser superior, un divino o un Ainur quizas, pero no habian ojos que pudieran verme, separé por instantes mi mirar de mi pensar y entonces pude verte...
Entre árboles, una cascada y mucha naturaleza, parecias princesa, con un vestido precioso y una corona de flores, rosas diria yo, pero no estaba seguro por la distancia... Me encontraba lejos, solo podia verte a la distancia... pero sabia que si hacia algo, tu me verias, porque tienes un ojo de aguila y podrias verme desde el lugar mas recondito del planeta. Allí pensé, "si le grito me oira"... pero no pude articular palabra alguna, mi boca sellada estaba, una desesperación me invadio, estar tan cerca, es decir, poder verte y no tener interaccion alguna, me exasperaba. Te veias tan bella, tu cabello brillaba con el sol de ese color castaño tuyo que yo confundí con negro, tus labios de aquel tono tan suave y calido, tu nariz preciosa "como una bolita", me decias tú, tu tez blanca, suave y delicada, parecia intocable. Una ninfa, angel o hada quizas, inalcanzable parecias...
En completo silencio y desfallecido de mi cuerpo, te observe durante mucho, el agua de la cascada te daba un fondo de pelicula, vi en ti el cuadro más bello del universo, el cuadro jamas pintado pero el más maravilloso y magico de todos, pasó un largo rato, tu caminabas con la cabeza gacha y muy lentamente, aun no podia ver tus maravillas de ojos... hasta que llego un punto donde levantaste la cabeza y el brillo de desierto hizo aun más bello el paisaje, dandole vida y magia... Entonces me miraste, me sentí renacer, aquel hormigueo en mi ser, el escalofrio por mi cuerpo y el corazón que bombardeaba de sangre mis vasos sanguineos. Nuestras miradas por fin se cruzaron y sonreiste, volviste a bajar la cabeza y continuaste tu viaje... te observe hasta que saliste de la escena de mis ojos... cuando te perdiste de mi visión pude gritarte "!!Te Amo!!" y cuando callé , un petalo de rosa el viento me entrego... lo besé y volví a tomar conciencia, mis ojos tomaron color y ví la acera, los charcos, la lluvia y la gente... volví a ser visible, retome en unos segundos la compostura y corrí por entre las gotas pues tenia que llegar a mi destino, a el entrenamiento de aquel dia. Mas mientras yo corria, mire mi mano y alli estaba un petalo de rosa suave y bello casi imperceptible al tacto humano...

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